Ayer hubo una pequeña reunión entre ellos a la que mi abuelo no pudo ir porque no quiso cerrar su negocio. En épocas de fin de cursos en las escuelas vende muy bien. En la comida comenzaron a hablar de su niñez. Rápidamente tomé nota.
Todo comienza con el patriarca Jesús Pablo Salamanca, hijo de Margarito Pablo Miramón, campesino con tierras en Atlixco y Huaquechula, en Puebla. Una generación atrás, la familia había adoptado el apellido 'Pablo', pero esa es otra historia y deberá ser contada en otra ocasión.
El hijo mayor Mateo Jesús Pablo Almorín ya no fue campesino, sino que se dedicó al comercio y se casó con Mariana Tenorio Bautista, española y por las fotos que he visto, gorda impresionante. Se establecieron en Atlixco, aunque con fuertes lazos en Huaquechula, que aún hoy es un pueblito alejado de la mano del señor, en dónde al parecer no conocen el drenaje (ni el jabón).
Los hijos de Jesús y Mariana: Valentín, Concha, Papá E., Jesús, Carlos, Carmela, Ángel, Coco, Lupe, Pepe, Mundo. (No me acuerdo del orden). Y tampoco me acuerdo de que son (o eran) cada uno de ellos. Han muerto Valentín, Carlos, Jesús y Ángel.
El hijo mayor Mateo Jesús Pablo Almorín ya no fue campesino, sino que se dedicó al comercio y se casó con Mariana Tenorio Bautista, española y por las fotos que he visto, gorda impresionante. Se establecieron en Atlixco, aunque con fuertes lazos en Huaquechula, que aún hoy es un pueblito alejado de la mano del señor, en dónde al parecer no conocen el drenaje (ni el jabón).
Los hijos de Jesús y Mariana: Valentín, Concha, Papá E., Jesús, Carlos, Carmela, Ángel, Coco, Lupe, Pepe, Mundo. (No me acuerdo del orden). Y tampoco me acuerdo de que son (o eran) cada uno de ellos. Han muerto Valentín, Carlos, Jesús y Ángel.
Jesús Pablo Tenorio fue escritor, cuya novela, LA PÍLDORA MARAVILLOSA, después fue plagiada en innumerables ocasiones, hasta en el cine recientemente con esta película:
Raymundo Pablo Tenorio también es escritor y profesor de literatura, aunque su género son los cuentos infantiles.
Y del gusto de mi abuelo por las letras ya he hablado.
Supongo que esto de escribir se trae en la sangre, como Tania me lo dijo, aunque no creo tener el talento de ellos, le echo ganas.
Parte de esta serie:
¡¡¡ letem bi lait !!!
2 comentarios:
Definitivamente amo tu banana... gracias por la dósis de este día...
Tengo que confesar que espero con ansia la siguiente entrega... y aunque ya te dije lo que me pasó con la anterior... debo decirte que con ésta quedé muy contenta...
(sigo con la duda)
Definitivamente lo de escribir lo traes en la sangre... y también ya sabemos de donde heredaste los cachetes mi´jo...
Besos mil... nos estamos leyendo ;)
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